Son las seis de la mañana y en el radio despertador empiezan a sonar los primeros acordes de "I got you baby"... este... no... espera ... esto es del "día de la marmota" ... si ... bueno... son las cinco y no he dormido nada bien, mi cuerpo me pesa ... eso... me pesa más que nunca y me cuesta un triunfo poderme sentar en la cama; lo que suena en la radio es "Tatuado": -"Siempre te despiertas con ganas de vomitar, toses, escupes, ¿pesadilla o realidad?, te levantas con la ruina en tu pecho, otro día tratar de olvidar... "
No puedo con el desayuno, tengo nauseas, la cabeza me estalla y mi cuerpo no me responde. El médico me dice: -"Lo siento mucho pero todavía no se ha inventado nada contra la normalidad, yo me encuentro igual que usted". Así que tengo que salir a la jungla como todos los días aunque no veo nada claro que pueda soportar el mal carácter de nadie. En el auto la radio escupe: - "todas las noches igual y todos los días igual...", después alguien habla: -"Blablá...coyuntura...blablá...marco previo... blablá", no entiendo nada... la apago.
Día gris, carretera gris, gente gris...la rutina me espera y como siempre podre con ella.
Como siempre me pierdo en:
" algún rincón de mi mundo donde ya no corre el tiempo, ni minutos ni segundos, ni guiones, ni argumentos... donde me quedo un ratito para recapacitar; guardo mil noches en vela, solo me queda esperar , que llegue la primavera, que no acaba de llegar". Casi estoy consiguiendo que pase la mañana plácidamente cuando oigo que alguien me grita, me grita una y otra vez... no lo soporto... pero, ¿por qué se va?...me ha sacado de mi ensoñación y me siento alterado sobremanera.
Noto tensar los músculos, se acelera el pulso y siento las palpitaciones en los oídos, la adrenalina me desborda, me suda todo el cuerpo, se me dilatan las pupilas, lo puedo sentir, ahora lo veo todo con una extraña claridad, resoplo por los hollares como un corcel encabritado listo para la batalla, me ciño el yelmo, embrazo el escudo, desenvaino el acero y lo empuño con una fuerza inusitada, ahora me siento mejor que bien, la testosterona ha tomado el poder, me encuentro "on fire" y creo que podre con lo que sea pero...¿dónde está el enemigo? , ¿por qué se esconde? . Un tipo se acerca, -como intente hacerme daño le parto en dos el alma, levanta el brazo y antes de que yo pueda reaccionar posa su mano en mi hombro y me dice: - tranquilo amigo, no merece la pena, y me sonríe de un modo tan sereno que me descoloca por completo.
Con su mano ha cerrado el circuito por donde se descarga toda mi energía negativa.
El tiempo se ha parado por un instante, la respiración se hace más pausada, muy lentamente aflojo la mandíbula, noto los músculos relajarse y comienzo a sentir dolor por todo el cuerpo; muy poco a poco, la tensión desaparece y tengo ganas de llorar... -pero no lo voy a hacer, a pesar de que nada me liberaría más, no quiero derrumbarme aquí.
No nos conocíamos de nada, nunca le había visto y no le he vuelto a ver. Charlamos un rato amigablemente mientras terminaba de serenarme, me explicó que las personas en ese sitio, como en muchos otros, no se dan cuenta de el daño que hacen y que todos tenemos los mismos problemas pero que aún así debemos convivir.... Nos despedimos con un apretón de manos y nos deseamos un buen día.
En otra ocasión me encontraba en un hospital en "el foro" por penosa causa y la situación estaba abocada a un trágico final, de modo que estaba dispuesto para lo que fuera menester, no tenía otra alternativa en realidad. En momentos así la sensibilidad se afina hasta extremos insospechados y el extraño transcurrir del tiempo, ora vertiginoso ora cuasi congelado, hace percibir la realidad un tanto curvada, ofreciendo perspectivas nuevas y sorprendentes. Las relaciones con los humanos circundantes se tornan diferentes, se alcanza a ver en profundidad y con increíble lucidez.
Supe de George Bernard Shaw: "cuando un hombre estúpido hace algo que le avergüenza, siempre dice que cumple con su deber"; supe de José luis Sampedro con su alegato en favor del personal sanitario y supe de multitud de excelentes personas anónimas. Lástima que sean esas circunstancias "especiales" las que nos empujen a tornarnos más receptivos.
También leí: "No todos los días son buenos, pero todos los días sucede algo bueno".
No puedo estar más de acuerdo.
Aquel día, el del tipo misterioso, empezó siendo mucho peor que horroroso y comenzaba a tornarse en "el puto día más extraño de toda mi vida" (siempre he querido decir esta frase de "Pulp Fiction"), pero un insignificante detalle (me pregunto cuántos pasaran desapercibidos en una vida), logro convertirlo en uno bonito por transcendente.
Aquel dichoso día traspasé un umbral de los que no tienen posibilidad de retroceso, tras él estaba el camino del autoconocimiento, la paz y el amor.
Apenas llevo recorridos unos escasos metros pero sé que es el correcto... veamos las bifurcaciones, las pendientes y las curvas...
"El alma no camina en línea recta, ni crece como un bambú.
El alma se despliega como un loto de innumerables pétalos"
Extracto de "El Profeta" Kahlil Gibran
Busco el equilibrio y la calma.
¿ Quién era ese tipo?